))))))))Tenebrae, amor e mortis((((((((

))))))))Tenebrae, amor e mortis((((((((
La poesía hace a los poetas, los poetas no hacen poesía, la escriben solamente...ORG

martes, 19 de abril de 2011

Regreso a la Oscuridad

¿De qué sirve ayunar por encontrar el perdón?
Caminar simulando que nada es real,
que el hambre no me acosará,
ni me hará pensar en lo que
dejé plantado en la mesa por capricho.

De nada ayuda pensar que un milagro
salvará mi jornada, si mis pensamientos
convencidos están de que llegaré aprisionado
por la duda y el cansancio a recostarme
para olvidar entre el sueño todo lo que
me hace sollozar.

¿De qué sirve mentir, implorar, pretender?
¡De nada!
En lo absoluto a nadie le importa
que el mundo se deshoje en la próxima
tormenta o se enfríe con tanta maldad.

Duele despertar y notar
que todo es aún peor que la noche anterior.

Creo que conozco esta situación,
me he encontrado en soledad junto a ella.
Y sin nada en mis manos regreso a la oscuridad.

Mañana será otro día,
un nuevo suspiro,
¿Una nueva desdicha o satisfacción?
Mañana lo sabré,
regreso a la oscuridad...
No porque es de noche,
a la oscuridad de mis cuestiones.

La oscuridad no tiene color,
no es la ausencia de luz.
Es la ausencia de tacto,
es la falta de conciencia.

Regreso a la oscuridad.
Sin nada en mis ojos,
sin emociones,
sin nada,
como desperté...

Regreso una vez más.

sábado, 9 de abril de 2011

Lágrimas de un vampiro II



Ha pasado el tiempo; nada es igual, todo el aroma de las flores del jardín que te ocultaba se ha perdido entre el smoke. Nada es igual desde que tu cuerpo se desintegró junto con mis latidos. El bullicio no cesa en las sombras.

Quiero hablarte de lo fatal que has sido el mundo sin tu voz, resucito a cada noche invocando tu regreso. Lamento jugar a ser eterno, claro está que jamás debí arroparte entre mentiras y el sádico brillo de mis ojos…no sirve de nada brillar entre tanta oscuridad y esperar con ansias ver a la Luna desnudarse detrás del bosque donde preparaba el círculo donde te haría mía.

Lloro desconsolado trayéndote flores. ¿De qué me sirve sacrificar los lienzos del campo si no los puedes sentir? El mundo es distinto, puedo jurarte que está colapsando. Ha sido roto el corazón de Gaia, llora junto conmigo, enfurece junto a mí…El mausoleo que te cobija está corroído por mi flaqueza, mis lágrimas quieren devolverte hacia mis brazos. Ya no tengo fuerza, pero; sigo esperando que suspires una vez más, un segundo más a mi lado, que me dejes iluminarte para llevarte conmigo.

En mi mente rebosa tu silueta. La mágica sentencia de muerte en tu piel, los adagios escritos en tus manos. Tu mente lo repetía, bien sabías que escuchaba tu aura pedirme auxilio. No puedo olvidar que un día me pensaste tuyo. Añoraba besarte despierta. Simulaba creer que soportarías todo el dolor que te adormeció en su regazo.

Creí que dormías y soñabas conmigo.

El mundo ha cambiado, para mal, el odio ha consumido el corazón de los humanos…No sé si decir humanos porque en la edad que ajusto en el tiempo he visto muy pocos, es una corona que pocos han alcanzado. No alcanzan siquiera a soñarla, no les importa. Ya han perdido el valor de caminar entre las flores.

Perdona mi ausencia, recolectaba rosas para adornar tu morada. La muerte es un camino que no puedo seguir, mi naturaleza me reniega ante el placer de dormir por siempre…abriría mis venas para acelerar mi encuentro contigo si pudiese. Es sólo una utopía en la que me entretengo cuando me acuesto a tu lado. La muerte sin flores es tétrica.

Acá no existe la soledad, sólo tu ausencia, que se alimenta con mi olvido, con mis lágrimas, mi dolor eterno. Mi falacia descomunal entre mis sueños.

Quisiera sacarte del oscuro lecho en el que descansas. Porque no tengo la fuerza para renunciar a ti. Tengo impresas tus huellas en mis manos, no dudo que puedan recrearme tu calor de mujer en las noches de invierno. Tu ausencia es más fría que el invierno, más dolorosa que la daga con que repaso tu nombre en mi pecho. Bebo mi sangre para guardarte tributo, ofuscar el dolor que me aprisiona en este mundo de decadencia.



Muero en vida al despertar…la Luna es mi única compañera, atestigua cada uno de mis lamentos.

Las lágrimas inundan mis ojos, el cristal refleja mi agonía cada noche al leer tu epitafio.

“Moraré por siempre en tus pensamientos;
bendigo cada segundo a tu lado.
me llevo una parte de ti…el brillo de tus ojos.”

Espera mi amada.
No todo dolor es eterno.
Más mi amor perdure, perdura el milagro.
Hasta siempre…