los campos al amanecer y viaja
buscando mi cadáver
hundido en el desierto.
Eres el rastro delicado adherido
sobre los corales ocultando las sirenas.
La estrella más radiante, el calor que
me enloquece, el grito del destino en la
maleza del bosque guiando mi existir.
Eres entre las espinas una rosa,
irisas mis días de la oscura soledad,
mi desdén ante la maldad.
Eres es silencio que reposa mi sufrimiento
y me libra del ruido confuso…mi trampa
perfecta, complot fallido de los dioses
que remeda la quimera de demonios injuriosos.
Eres la miel que borra mis estigmas,
Mis recuerdos y condena los resabios.
Eres mi tregua con el tiempo en la
absurda lucha sin riesgos ni emoción.
La magia que me hace soñar, reír y
llorar cuando despierto de mis Terrores
Nocturnos.
Son tus palabras mi dulce melodía,
la mutación del infierno a un flamante
lucero; tus ojos…mi ventana al mundo.
Soy sólo un fantasma perdido en el
la ciudad oscura, en la ruina que quedó
Posterior a la masacre.
Eres tú mi rutina más bella;
mi eclipse en la oscuridad…
mi eclipse en la oscuridad…
Me gustaría que te leyera más gente, que viera lo que aquí haces.
ResponderEliminarEste poema te lo voy a robar te aviso...
¿Mi comentario? Un regalo, un intento de poesía que a mi no se me da muy bien, pero bueno. Con todo mi respeto...
Por fin quedó enterrado el recuerdo
en tumbas cubiertas de rosas negras.
Su lápida? Blanca,sin fecha,sin epitafio
sellando el olvido de lo que una vez fue.
No habrá un lugar para llorar ese tiempo
por un alma inexistente, desvanecida…
Jamás existieron realmente los instantes,
ni siquiera la sutil realidad de un poema.
Quién se compadece por este egoísmo,
por la imagen de una quimera de dolor.
La muerte desgrana cruel los colores
Convirtiéndolos en tristes mentiras.
Pero sobre ellas, una eterna verdad:
La diosa Selene desnuda en su noche
Arrasando toda la oscuridad con su luz.
Un abrazo príncipe oscuro.